El agua es un recurso limitado, por lo que es necesario conseguir un máximo aprovechamiento de la misma. Actualmente, se utilizan varios sistemas y métodos para el aprovechamiento del agua de lluvia en los cultivos pero acaban presentando importantes limitaciones.

De este modo, se ha patentado un dispositivo que se encuentra enterrado o semienterrado en el terreno circundante al cultivo  y que facilita  la infiltración  en profundidad del agua de lluvia, riego o escorrentía de forma significativa, favoreciendo además la incorporación de nutrientes y  el aumento de la producción y calidad del producto agrario. El dispositivo está constituido por una envoltura a modo de malla y rellena de biochar; el biochar (término internacional para referirse al carbón vegetal) se obtiene pirolizando biomasa procedente de los cultivos, masas forestales o residuos orgánicos de la industria agroalimentaria. Se ha demostrado que este material tiene efectos positivos sobre la fertilidad (física, química y fisicoquímica) del suelo.

También se ha desarrollado el procedimiento óptimo para la instalación en campo del dispositivo así como formas de manejo adecuadas que permitan explotar al máximo su función y eficacia.

Esta tecnología ha sido probada en ensayos de campo, concretamente en cultivos de olivo, demostrando una mejora significativa en la productividad. Sorprendentemente, mediante este procedimiento es posible incrementar el rendimiento de los olivos en más de 74% e incrementar la producción media de aceite por encima del 280% en zonas con baja pluviometría.

Figura 1. Representación esquemática del sistema de la invención, en la que D es el dispositivo de la invención, S representa los sedimentos acumulados, Z2 las zonas de mayor cota y Z3 las microcuencas creadas artificialmente.

Ventajas

• Dispositivo económico, versátil y de fácil instalación. El dispositivo está constituido por materiales de bajo costo y que además, presenta distintas variantes para poder ser adaptado a diferentes ambientes y objetivos.

• Mayor aprovechamiento del agua de lluvia, riego y escorrentía en comparación con los sistemas convencionales actuales, gracias a que el dispositivo de la invención por un lado almacena el agua en profundidad (y no de forma laminar), evitando así, la zona del suelo afectada por la evaporación solar, y por otro lado, al biochar, un material ultraporoso capaz de almacenar gran cantidad agua.  Este aprovechamiento eficaz del agua implica:

  • Infiltración y depósito eficiente del agua en el terreno durante todo el año, y no solo durante los meses de alta pluviometría y baja tasa de evaporación solar.

  • Incremento del rendimiento agrícola de los cultivos situados en el entorno del dispositivo de invención, tanto en términos de cantidad como de calidad. En el cultivo del olivo, ha provocado mejoras considerables tanto en la cantidad de aceitunas recolectadas como en la  productividad de aceite (pudiendo llegar a triplicarse en años secos).

  • Recarga de los acuíferos de la región (aumento de los niveles freáticos) gracias a la infiltración del agua en altas cantidades, aumentando los recursos hídricos para uso natural y agrícola como para uso urbano e industrial. 

  • Evita el encharcamiento de la superficie del terreno.

  • Reducción de la erosión hídrica del suelo y de la pérdida de tierra fértil ante episodios de lluvias moderadas y torrenciales, al potenciar la infiltración de estas aguas en la profundidad del suelo. 

• El biochar mejora física y químicamente el suelo de forma localizada y duradera, pues el biochar es un material poco biodegradable capaz de formar reservorios nutricionales cerca de las raíces de las plantas, formar estructuras aptas para albergar microorganismos al ser muy poroso, evitar pérdidas de nitrógeno por volatilización, etc. 

• Ayuda a mitigar el cambio climático. La creación de biochar y su enterramiento en el suelo supone un secuestro de CO2, que es el principal responsable del cambio climático. Se estima que 1 kg de biochar secuestra aproximadamente 3kg de CO2. 

• Se promueve la gestión sostenible de los residuos agrícolas potenciando el uso de los residuos en forma de biochar. El uso de biochar supondría una forma de retorno al suelo de los recursos extraídos del mismo.